WASHINGTON — La Asociación Nacional de Educación, el sindicato más grande del país y con tres millones de miembros, se opone a la elección de Linda McMahon por parte del presidente electo republicano Donald Trump para dirigir el Departamento de Educación, una agencia que Trump y sus legiones quieren eliminar de todos modos.
“Los estudiantes merecen algo mejor que favores políticos”, tuiteó la NEA el 17 de diciembre. “Linda McMahon no está calificada para dirigir el Departamento de Educación y carece de la comprensión necesaria para ayudar a las escuelas públicas, donde aprende el 90% de los estudiantes, a prosperar”.
La presidenta del sindicato, Becky Pringle, una maestra de ciencias de Filadelfia, etiquetó a McMahon como “Betsy DeVos 2.0”, en referencia a la controvertida Secretaria de Educación de Trump en su primer mandato, una gran donante del Partido Republicano que odia las escuelas públicas, sus maestros, sus sindicatos y sus estudiantes, especialmente los estudiantes de color.
McMahon, una ferviente partidaria de Trump y otra multimillonaria en su gabinete de charlatanes, dirigió la World Wrestling Entertainment, fundada por su marido, Vince McMahon. Ambos son grandes donantes republicanos. Trump la nombró para su gabinete de primer mandato como administradora de pequeñas empresas.
La Asociación de Maestros (AFT), el otro gran sindicato de maestros del país, ha adoptado una actitud de esperar y ver qué pasa con la elección de Trump, al tiempo que señala que la política educativa probablemente se forme en la Casa Blanca, no en la oficina del Secretario.
Tanto la AFT como la NEA hicieron campaña contra DeVos, que ganó el puesto cuando el Senado se dividió 50-50 en la nominación de Trump para ella y el vicepresidente republicano Mike Pence desempató.
“Todos los estudiantes, sin importar dónde vivan, cuánto gane su familia o el color de su piel, merecen la oportunidad, los recursos y el apoyo que necesitan para alcanzar su máximo potencial. En todas las comunidades de este país, los padres y los educadores son socios en este esfuerzo”, dijo Pringle.
“Al elegir a McMahon, Trump demuestra que no le importa en lo más mínimo el futuro de nuestros estudiantes. En lugar de trabajar para fortalecer las escuelas públicas, ampliar las oportunidades de aprendizaje para los estudiantes y apoyar a los educadores, la única misión de McMahon es eliminar el Departamento de Educación y quitarles el dinero de los contribuyentes a las escuelas públicas, donde aprenden el 90% de los estudiantes (y el 95% de los estudiantes con discapacidades), para dárselo a escuelas privadas irresponsables y discriminatorias”.
“Durante su primer mandato, Donald Trump nombró a DeVos para socavar y, en última instancia, privatizar las escuelas públicas a través de vales. Ahora, él y Linda McMahon están de vuelta con su propuesta extrema del Proyecto 2025 para eliminar el Departamento de Educación”.
El dúo “robaría recursos para nuestros estudiantes más vulnerables, aumentaría el tamaño de las clases, recortaría la capacitación laboral, encarecería la educación superior y la dejaría fuera del alcance de las familias de clase media, eliminaría los servicios de educación especial para estudiantes discapacitados y pondría en riesgo las protecciones de los derechos civiles de los estudiantes”.
“Los padres y los educadores se unirán para apoyar a los estudiantes y rechazar las políticas dañinas, extravagantes e insultantes que está impulsando la administración Trump… El Senado debe defender a nuestros estudiantes y rechazar al candidato no calificado de Donald Trump. Nuestros estudiantes y nuestra nación merecen mucho más que Betsy DeVos 2.0”.
El tercer sindicato fuertemente involucrado en las escuelas de Estados Unidos, el de Administradores Escolares, aún no ha tomado una posición sobre la nominación de McMahon.
El galardonado periodista Mark Gruenberg dirige la oficina de People’s World en Washington, D.C., y edita el servicio de noticias sindicales Press Associates Inc. (PAI). Conocido por sus habilidades periodísticas, su agudo ingenio y su amplio conocimiento de la historia, Mark es un entrevistador compasivo pero duro cuando se trata de las grandes corporaciones y sus multimillonarios propietarios.
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