Las uniones laborales siguen ganando impulso, según la última encuesta de Gallup, la cual demuestra que el 64 por ciento del público estadounidense aprueba las uniones, la tasa más alta en 50 años.
Más y más gente, sin importar su afiliación política, percibe a las uniones laborales como esenciales para hacer más justas las reglas de la economía, proveer seguridad económica y equilibrar un sistema que favorece a los ricos y poderosos.
Esta tendencia capturada por la encuesta de Gallup no es una moda pasajera. Se debe a que los trabajadores se están dando cuenta del poder que adquieren al formar parte de una unión y de las ventajas de tener una voz en el lugar de trabajo.
“A pesar de los ataques incesantes de las corporaciones ricas en contra de las uniones, más gente reconoce que las uniones son una fuerza para el progreso y una fuerza nacional, mejorando las vidas de las familias obreras y sus comunidades”, afirmó el Presidente de AFSCME, Lee Saunders. “El movimiento laboral está cobrando más y más fuerza. Aprovecharemos este impulso y lo llevaremos a las nuevas campañas de organización y a nuestro trabajo en las elecciones de 2020”.
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